martes, 4 de agosto de 2009

+ Primero yo... +


Hoy me detuve en el espejo de mi baño y vi a una mujer mayor, sin sueños... Con la rutina de toda la vida y me di cuenta que me levanté 15 minutos más temprano que nunca. Me había olvidado cuando fugazmente despertaba hace unos pocos años sonriente y me animaba que ese día fuera mejor que el anterior.Precisamente no recuerdo cuando cambió eso. Por despertar atrasada, desesperada por el tiempo, por los pendientes, empecé a no ir a los salones de belleza con la misma frecuencia porque el dinero lo ocupaba para otra buena actividad familiar. No tengo más de 35 años y me siento como de 90 años. Desesperada porque no he realizado muchas cosas, pero esas cosas ya no son los sueños de antes.Hoy que desperté 15 minutos antes de mi vieja rutina, recordé que mi esposo tuvo una reunión de compañeros, se fue y ni me avisó, hoy recordé que mi hijo de 5 años no me obedece y el de 10 dice que soy ridícula porque no soy hombre como él y la niña de 2 años sólo me llama cuando necesita algo. Estoy segura de que todos saben que los amo pero... ¿Cómo me pueden valorar si yo no lo he hecho?Por eso, hoy y a partir de hoy seré primero yo, y lo quiero compartir con ustedes. Levántense 15 minutos antes, mírense en el espejo y díganse a sí mismas a quien ven, ¿les gusta esa mujer o desean ser otra? Nunca es tarde, tarde sería si mueren. Ese hoy fue hace 2 años y las cosas cambiaron mucho, pero no fue fácil, por supuesto que no.Me costó levantarme temprano para cepíllame el cabello bien y arreglarme para trabajar; renuncié a mi trabajo de 15 años (aún lo extraño) y empecé a ir al gimnasio. Los primeros meses fue un fracaso, pero luego bajé de peso, cambié mi forma de vestir y hasta mi esposo asombrado me invitó un día a una cena para preguntar si nuestro matrimonio continuaba o tenía otro amor, le dije sin pensar: sí tengo otro amor que me llena completamente y ese amor soy yo.Y bueno que más les puedo decir, soy otra porque ahora primero soy yo. Nos pasa que de pronto un día miramos de reojo una vidriera y vemos una imagen reflejada que no es la nuestra. Sucede que al mirarnos apuradas todas las mañanas reconocemos que ya no somos las mismas y añoramos a esa mujer que perdía horas preciosas inventando un nuevo peinado, o que soportaba una crema en el cabello y lo envolvía en una toalla para que luego tuviera un brillo destacable...Mascarillas que nos hacían lucir espléndidas, maquillajes intensos que nos mostraban a una mujer sensual y atractiva, escotes, pantalones ceñidos, tacones que endurecían nuestras piernas al andar... Un día nos encontramos recordando a aquella mujer y sentimos que la fuimos sepultando lentamente. Presenciamos su lenta agonía y no hicimos nada para revivirla.La pareja, la familia, los niños... El gato, el perro, el canario... La casa, las compras, el trabajo... El auto, la limpieza, las camas bien tendidas, el orden... Y allí debajo una mujer que grita: ¡socorro! que se mueve con amor, con sensibilidad, con vocación, pero que dejó lentamente que todo la supere y se quedó ahí, en ese lugar viendo pasar la vida de los otros y se olvidó de sí misma. Tenemos que revivir a esa mujer y hacer que diga:¡Presente todos los días! Primero yo, y eso no significa que soy egoísta... Primero yo, y eso importa. Intentemos recuperar a esa mujer bella que nos hacía sentir seguras, desterremos las culpas y si el desayuno, el almuerzo, la merienda o la cena se demoran un poquito porque estamos poniéndonos lindas, pensemos que ese cuidado de nosotras mismas, esa dedicación, ese amor serán la medicina mágica que hará que nuestra autoestima crezca.Si nuestra autoestima no está bien, nada este bien en nuestra vida, y por ello dejamos que otros nos desvaloricen o nos desprecien. Primero yo... Mi vida es una piedra preciosa, soy la única que puede hacer que se destaque su brillo o dejar que se apague para siempre.Nunca se olviden de que nadie las valorará ni las amará si no piensan en primero yo.* Autora: Lorena (México) *

Mujer, Jamás Permitas...

¡¡Hola todos!!
Después de algunos dias de ausencia, quiero compartir con ustedes esta bella reflexión, espero les guste:
Jamás permitas que algún hombre te esclavice,
tú naciste para amar y no para ser esclava.
Jamás permitas que tu corazón sufra en nombre del amor,
amar es un acto de felicidad, ¿porqué sufrir?.
Jamás permitas que tus ojos derramen lágrimas
por alguien que nunca te hará reír.
Jamás permitas que tu cuerpo sea usado,
sabes que tu cuerpo es la morada del espíritu,
entonces, ¡mantenlo apreciado!.
Jamás permitas quedarte horas esperando
por alguien que nunca vendrá,
¡así te lo tenga prometido!.
Jamás permitas que tu nombre sea pronunciado en vano
por un hombre, ¡que ni se sabe si tiene nombre.
Jamás permitas que tu tiempo sea desperdiciado
por alguien que nunca tendrá tiempo para ti.
Jamás permitas escuchar gritos en tus oídos,
¡el amor es el único que puede hablar más alto!.
Jamás permitas que pasiones desenfrenadas
te saquen de un mundo real para otro que nunca existió.
Jamás permitas que los otros sueños se mezclen a los tuyos
haciéndolos girar en una gran pesadilla.
Jamás confíes que alguien pueda volver,
¡cuando nunca estuvo presente!.
Jamás permitas prestar tu útero para engendrar
un hijo que nunca tendrá un padre.
Jamás permitas vivir en la dependencia de un hombre
haciendo creer que tú naciste inválida.
Jamás permitas que quedes linda y maravillosa,
¡para esperar a un hombre que no tiene ojos para admirarte!.
Jamás permitas que tus pies caminen en dirección de un hombre,
¡que sólo vive huyendo de ti!.
Jamás permitas que el dolor, que la tristeza, que la soledad,
que el odio, que el resentimiento, que los celos, que el rencor
y todo que pueda sacar el brillo de tus ojos;
haciendo debilitar la fuerza que existe dentro de ti.
Jamás te permitas perder tu dignidad de ser... ¡Mujer!.
"Hombre... cuídate mucho de hacer llorar a una mujer, pues, ¡Dios cuenta sus lágrimas!.La mujer salió de tu costilla, no de tus pies para ser pisoteada,
ni de tu cabeza para ser superior; sino del lado para ser igual...
Debajo de tu brazo para ser protegida y al lado de tu corazón para ser amada."...
Desconozco su autor